Es probable que hayas pasado parte del 2020 haciendo algunas compras en línea. Ahora que ya están llegando las fiestas, sin dudas que tú — o tus amigos o familiares — quieren asegurarse de recibir lo que han ordenado. En este 11º día de Protección del Consumidor, sigue estos pasos para que Rudolph encuentre su camino de regreso a casa con tu ayuda.
- Confirma que el vendedor sea legítimo. Lee comentarios y recomendaciones sobre el producto, vendedor y garantías de fuentes confiables. Busca comentarios sobre su reputación y su servicio al cliente, y asegúrate de poder comunicarte con el vendedor si tienes una disputa.
- ¿Hoy es nochebuena y mañana es Navidad? Antes de hacer tu orden de compra, fíjate atentamente en la fecha de despacho y entrega. Si no hay una fecha establecida, el vendedor tiene 30 días para despachar tu compra. Si te notifican una demora en el despacho, tú tienes derecho de cancelar la orden y obtener un reembolso total. Si decides cancelar, infórmaselo inmediatamente al vendedor para que no te facture.
- Dales un poco de "crédito", pero de plástico. En lo posible, paga con tarjeta de crédito — eso te da varias protecciones otorgadas por ley. Si pagas con una tarjeta de crédito, es posible que puedas disputar ciertos cargos — y retener temporariamente el pago de aquellos cargos que estén pendientes de investigación.
- Haz un seguimiento de tu entrega — y protégela. Guarda un registro de tu orden de pedido, incluidos los números de rastreo. De esta manera puedes ver en qué punto del proceso de envío está lo que compraste. Además, considera pedir que retengan lo que compraste en la oficina postal o que se lo entreguen a un familiar o vecino en caso de que no estés en tu casa. Hay algunas compañías que tienen sus propios locales seguros donde se puede entregar tu mercadería. Esto te protege de que algún Grinch te robe la alegría de las fiestas de la puerta de tu casa.