En el 12º y último día de Protección del Consumidor — sólo es el último de esta serie, no para siempre — algunos recordatorios para cualquiera sea la fiesta que celebres (o no) durante este mes de diciembre. Ya sea que estés por comprar una refrigeradora que te haga acordar de se acabó la leche (ya puedes apagarte refrigeradora, yo me encargo de eso) o unas pantuflas abrigadas, recuerda lo siguiente:
- Lee los comentarios. ¿Qué dicen los expertos sobre el producto que te interesa? ¿Comparan marcas o versiones del producto? ¿Es necesario tener conocimientos de tecnología para apreciarlo y usarlo?
- Compara precios. Es obvio, ¿no? Pero en esas “ofertas” especiales imperdibles, ya sea en línea o en persona, con precios muy pero muy bajos tienes que actuar rápido. Así que te conviene hacer la tarea por adelantado sobre cuál es el rango de precio que esperas, especialmente para los artículos más costosos. De esta manera podrás saber qué es un trato conveniente y qué es alharaca publicitaria.
- ¿Y la privacidad? Tú sabes cuál es tu nivel de comodidad con respecto a la cantidad de información que quieres compartir con tus dispositivos. Pero si estás haciendo un regalo, ¿cómo se sentirá la persona que lo reciba, por ejemplo, con un reloj que hace un conteo de sus pasos y que la alienta a caminar más? No sé, ¿pero podría prenderle fuego unos días después? ¿O agradecerte TANTO la sugerencia de que debe hacer ejercicio? Teóricamente, claro.
- Paga con tarjeta de crédito. Cuando compras y pagas con tarjeta de crédito (en línea o en cualquier otro lugar) tienes el mejor nivel de protección.
Esperamos que la serie de 12 Días de Protección del Consumidor te haya ayudado a recordar algunas maneras de ahorrar dinero y protegerte de las estafas. Y esperamos que hayas compartido estos artículos y gráficos del blog con tu red de contactos. ¡Todavía no es tarde para hacerlo! Comparte — y suscríbete al blog en ftc.gov/es/conectese para mantenerte informado sobre las últimas estafas. Y tus amigos de la FTC te desean felices fiestas.