Durante la etapa preadolescente — entre los 8 y los 12 años — los niños comienzan a explorar con mayor nivel de independencia. Necesitan sentirse más “independientes”, pero no solos. Cuando están en internet, es importante estar con ellos — o por lo menos cerca de ellos. Considere instalar la computadora en un lugar de la casa que le permita estar cerca de usted o de otro adulto.
Si hasta ahora los chicos no habían comenzado a usar internet para hacer las tareas de la escuela, es probable que sea el momento en que empiecen a hacerlo. Es también el momento en el cual pueden empezar a descubrir recursos para sus pasatiempos favoritos y demás intereses.
Muchos preadolescentes son adeptos a la búsqueda de información en internet, pero siguen necesitando del consejo de un adulto que los ayude a entender cuáles son las fuentes confiables.
Piense en establecer límites.
Cuando considere qué es lo que sus hijos preadolescentes pueden hacer y ver en internet, piense también cuánto tiempo pasan en línea. Considere establecer límites para la frecuencia y duración de sus sesiones de navegación en internet.
Considere los controles para padres.
Para los preadolescentes más chicos, usar los controles para padres— por ejemplo, las herramientas de filtro o monitoreo —puede ser efectivo. Sin embargo, muchos preadolescentes que cursan la escuela media poseen conocimientos técnicos para sortearlos.