Mientras continúan los esfuerzos de recuperación en las áreas más afectadas por el reciente azote de la madre naturaleza en ambas costas, los estafadores no se quedan atrás. Ellos ven una tragedia como una oportunidad, y utilizarán la devastación causada por las severas tormentas, como el tifón Merbok, el huracán Fiona, y el huracán Ian que ahora se dirige hacia la costa, para tratar de aprovecharse de los afectados y de las personas que tratan de ayudar. Por eso es tan importante saber cómo detectar las estafas que suelen surgir después de los desastres naturales.