Es posible que hayas escuchado hablar de los servicios de entrega de comidas como DoorDash o Uber Eats: tú haces un pedido a través del sitio web de un restaurante o de una aplicación móvil de un servicio de entrega y los conductores te llevan tu comida. Estamos escuchando que circula una nueva estafa que apunta contra los conductores de servicios de entrega de comidas y los restaurantes.
Los estafadores que se hacen pasar por personal de “apoyo” de servicios de entrega de comidas se están comunicando con repartidores y restaurantes y están tratando de robarles su información personal y financiera.
En uno de los escenarios, el estafador les dice a los conductores de los servicios de entrega y a los restaurantes que les están enviando una tablet o impresora gratis para gestionar los pedidos de entrega de comidas. Entonces dicen que necesitan “verificar” tu número de teléfono, email y datos de inicio de sesión, número de Seguro Social y cuenta bancaria para poder enviarte el equipo.
En otro escenario, el estafador dice que necesita el email del conductor o los datos de su cuenta bancaria debido a que hay un problema con una orden de pedido, o porque quieren devolverle el dinero de una orden de pedido cancelada. Después de conseguir el email del conductor o del dueño del restaurante, puede que el estafador pida un código de verificación de email... que es un dato que no querrás compartir nunca con nadie.
Si te piden algo como esto, sin importar dónde trabajes: pisa el freno. Así es como puedes evitar las estafas.
- No le des tu información personal ni financiera a alguien que te llame por teléfono o te envíe un mensaje de texto o email inesperadamente. Puede que estén tratando de robarte.
- Si piensas que es un pedido legítimo, comunícate directamente con el negocio. Pero usa un número de teléfono que te conste que es real o un sitio web o aplicación que busques por tu cuenta.
- Nunca compartas un código de verificación de email con nadie si no fuiste el primero en establecer contacto. Los estafadores andan detrás de tu información y de tu dinero. Al compartir los códigos de verificación les es más fácil hacerse pasar por ti. Una vez que logran ser “tú”, tienen acceso a tus cuentas y pueden apropiarse de tu dinero.
Averigua qué hacer si le pagaste a un estafador o si le diste tu información a un estafador.
Y si detectas estas estafas, cuéntaselo a la FTC en ReporteFraude.ftc.gov. Cuando reportas una estafa, ayudas a la FTC y otras agencias a cargo del cumplimiento de la ley a detener las estafas.